17.5.14

RATA PORCINA

Y sin notarlo, la cortina de arena me estaba rodeando.
Moviéndose, imperceptible, colándose en cada espacio y partícula existente.
Envolvente, tanto que me lleva y me deja caer para que vea lo que ocasiona su consecuencia.
Y es ahí cuando ya no es lo mismo de ayer, cuando identifico mi propio efecto, lo que reflejo y entrego.
Sin porqué sino de que manera un hasta donde y cuando.
Hasta siempre e infinito.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario